Inauguración de entradas

Inaguranos una serie de entradas que se irán publicando en esta página, redactadas y elaboradas por Manolo Navas Martí, uno de nuestros formadores y Miembro del Comité Técnico de AVEM, TD2 en Escalada y TD2 en Alta Montaña.

Os dejamos con la introducción de la SERIE y damos la bienvenida a Manolo Navas como editor de la página de AVEM. ¡Junt@s somos más!

Estas serán una serie de entradas que podríamos llamar, “LAS CLÁSICAS MÁS CLÁSICAS”, en la que pretendo comentar una serie de vías de escalada de la Comunidad Valenciana, que reúnan esa doble condición, de clásica por su estilo de escalada (semi, o totalmente desequipadas) y también de clásica por su antigüedad, popularidad o por ser características de una determinada zona.

Intentaré incluir la reseña y datos de interés, así como comentar todo lo que pueda sobre aperturistas, historia, anécdotas, etc. No es mi intención hacer una guía, y quien quiera escalarlas deberá informarse adecuadamente, sino simplemente descubrirlas a quien no las conozca, y recordar que existen a quien sí.

La idea es que además se trate de vías de “grado asequible” que permitan a escaladores ya iniciados en vías largas deportivas, adentrarse poco a poco en eso que ahora se llama “TERRENO DE AVENTURA”, primero en vías que solo requieren la colocación de algún seguro intermedio para mitigar “alejes”, luego en semi equipadas y poco a poco en las que requieren de autoprotección en todos sus largos.

Parece que, actualmente, entre muchos escaladores “deportivos” incluso con un grado más que aceptable, que ya dieron el paso a las vías de largos, existe cierto “reparo” a la hora de decidirse a dar el siguiente. La perspectiva de no encontrar un parabolt cada pocos metros no resulta fácilmente asumible.

Es verdad que, incluso quienes empezamos en un tiempo en que toda la escalada era clásica, (aunque no lo sabíamos), porque no había parabolts en las paredes, hoy día tenemos dificultades en “reajustar el coco” cuando llevamos un tiempo sin adentrarnos en ese mundo en que todavía está vigente aquello de… “el primero nunca se cae”, donde una sucesión de expansiones no nos va a indicar siempre el camino, y hay que “navegar” en la roca.

Serán vías donde los horarios son otros, ya que colocar tus seguros y montar o reforzar reuniones es mucho más lento que “chapar y seguir”, pero una vez asumido esto, y teniendo en cuenta desde luego que hay que ir siempre “sobrado” en el grado y documentarse mejor si cabe sobre el trazado y demás aspectos de la vía.

No será necesario ser un gran escalador para hacer un número considerable de vías en paredes de montañas emblemáticas en nuestra comunidad, y no digamos si nos desplazamos a la alta montaña estival, sencillamente bastará, como en cualquier actividad de montaña, partir de una formación básica en el uso de materiales y técnicas propias de la “clásica”, ir asumiendo progresivamente retos a nuestro alcance.